Colbún S.A. es una empresa productora de electricidad chilena, creada a partir de las centrales hidroeléctricas de Colbún y Machicura de Endesa en 1986 y traspasada como empresa filial de la Corporación de Fomento de la Producción (CORFO). En 1997, CORFO vendió 37,5% de su participación y en marzo de 1997, fue privatizada completamente. Sus accionistas principales son Minera Valparaíso S.A., del Grupo Matte (34,97%) y Electropacífico Inversiones Ltda. (28,60%). En 2013, le compra a Endesa la central hidroeléctrica Canutillar. Posteriormente, absorbe la Hidroeléctrica Cenelca S.A. propietaria de Hidroeléctrica Guardia Vieja S.A. y Cenelca S.A. (2005) pasando estas dos últimas a ser filiales.
Trabajadores
1084
Sector Industrial
Energía y Combustible
Uno de los lineamientos de la Estrategia de Biodiversidad es fomentar el conocimiento de especies endémicas o en categorías de conservación, así como de sus hábitats presentes en nuestras áreas de operación. En un trabajo colaborativo con especialistas, en 2023 iniciamos el Plan de Monitoreo Voluntario para especies de fauna vertebradas. Este proyecto busca fomentar el conocimiento de las especies existentes en nuestras áreas de influentes, su estado ecológico, la caracterización de sus hábitats, así como su evolución en el tiempo.
Este año se sumaron las cuencas del río Maule y Aconcagua a este proyecto, uniéndose a los que ya se realizaban en el río Chamiza y Chapo. Estos monitoreos son complementarios a los planes de seguimiento ambiental existentes en las instalaciones que cuentan con Resoluciones de Calificación Ambiental (RCA) que lo exijan.
Hito ictiológico en río Maule
Gracias a los monitoreos voluntarios que llevamos a cabo, en 2023 se detectó la presencia de Nematogenys inermis, especie de pez endémica de Chile. Fue localizada en un brazo del río Maule, aguas abajo del embalse Colbún y de la descarga de la central hidroeléctrica San Ignacio. Esta especie se describía como extinta en casi todos los ríos chilenos desde 1975, encontrándose solo ocasionalmente en algunos esteros de la zona central del país. Adicionalmente, se registró la especie Percilia gillissi, clasificada en peligro de extinción, también aguas abajo del embalse Colbún. Ambas especies se encontraban en periodo reproductivo, conformando poblaciones activas con individuos juveniles y adultos.
Con el objetivo de aumentar la circularidad de las cenizas generadas en la central Santa María, estás se enviaron a dos diferentes cementeras, valorizando aproximadamente 49.980 toneladas. Además, en la misma instalación, se recirculó la escoria dentro del mismo proceso, disminuyendo así los envíos de éstas a disposición final. Con las medidas mencionadas, se logró una valorización total del 80,85% del total generado.
El 30.7% de la superficie terrestre está cubierta por bosques y estos, además de proporcionar seguridad alimentaria y refugio, son fundamentales para combatir el cambio climático, pues protegen la diversidad biológica y las viviendas de la población indígena. Al proteger los bosques, también podremos fortalecer la gestión de los recursos naturales y aumentar la productividad de la tierra.
El consumo y la producción sostenible consisten en fomentar el uso eficiente de los recursos y la energía, la construcción de infraestructuras que no dañen el medio ambiente, la mejora del acceso a los servicios básicos y la creación de empleos ecológicos, justamente remunerados y con buenas condiciones laborales. Todo ello se traduce en una mejor calidad de vida para todos y, además, ayuda a lograr planes generales de desarrollo, que rebajen costos económicos, ambientales y sociales, que aumenten la competitividad y que reduzcan la pobreza.
Las ciudades son hervideros de ideas, comercio, cultura, ciencia, productividad, desarrollo social y mucho más. En el mejor de los casos, las ciudades han permitido a las personas progresar social y económicamente. En los últimos decenios, el mundo ha experimentado un crecimiento urbano sin precedentes. En 2015, cerca de 4000 millones de personas vivía en ciudades y se prevé que ese número aumente hasta unos 5000 millones para 2030. Se necesita mejorar, por tanto, la planificación y la gestión urbanas para que los espacios urbanos del mundo sean más inclusivos, seguros, resilientes y sostenibles.